(Télam) – Las elecciones del domingo en Colombia encierran algunas particularidades, entre ellas que el partido gobernante no lleva candidato propio, que los principales aspirantes a la Casa de Nariño tienen pasado de alcaldes de buena imagen y que los comicios dieron paso a un enorme juego de alianzas, producto en buena medida de la fragmentación del sistema político.
Algunos datos y curiosidades son las siguientes:
– Los cuatro principales candidatos, los únicos con chances reales de triunfo –aunque las encuestas los muestran muy lejos a unos de otros- tienen pasado de alcaldes exitosos. En Colombia, las alcaldías son cargos fuertes y una enorme vidriera. De hecho, todos los analistas consideran que el segundo cargo de relevancia en el país, después de la presidencia, es la alcaldía de Bogotá.
Gustavo Petro fue alcalde de Bogotá; Sergio Fajardo y Federico Gutiérrez de Medellín, y Rodolfo Hernández, de Bucaramanga.
– En las cuatro fórmulas principales hay dos mujeres, ambas como candidatas a vice: la ambientalista y feminista Francia Márquez acompaña a Petro, después de haberse ganado el lugar por la sorprendente votación que logró en las consultas interpartidarias de marzo: 785.000 sufragios. Negra, participante de los diálogos de paz con las FARC, distinguida con varios premios internacionales, Márquez aparece como una de las sorpresas del proceso.
Y secunda a Hernández la caleña Marelen Castillo Torres, ingeniera, licenciada en Biología y Química, magister en Administración y Gestión de Empresas y doctora en Educación.
Otra mujer completa una de las fórmulas de presentación testimonial, de acuerdo con los escasos apoyos que prevén los sondeos: Sandra de las Lajas Torres Paz escolta a John Milton Rodríguez, de Colombia Justa Libres.
– En contra de una costumbre muy arraigada en América Latina, y muy fuerte en la Argentina, ninguno de los cuatro candidatos centrales es abogado: Petro es economista; Hernández y Gutiérrez son ingenieros civiles (en el caso del candidato de Equipo por Colombia, además, es urbanista) y Fajardo es matemático.
– El sistema político colombiano exhibe una alta fragmentación, con decenas de partidos y movimientos. Cada alianza de las que participará el domingo está integrada por al menos siete u ocho sellos, muchos con representación parlamentaria. Pero, además, una ley de 1994 permite la inscripción de candidaturas independientes, a partir de la recolección de firmas. Fue el mecanismo que hizo postulante a Hernández.
La rareza de este proceso está dada por el hecho de que el Centro Democrático (CD), la fuerza en el gobierno desde 2018, no lleva candidato ni anunció su respaldo a ninguno. Y tampoco Cambio Radical (CR), habitual aliado del oficialismo. CD tendrá en el nuevo Congreso 15 representantes y 13 senadores, y CR 16 y 11, respectivamente.
– A fines de septiembre de 2020 la Registraduría Nacional –que organiza parte del proceso electoral- contabilizaba 31 comités inscriptos para propiciar candidaturas de independientes y 30 postulantes de partidos o movimientos. La lista se fue depurando y las consultas interpartidistas de marzo también sacaron del camino a varios dirigentes. Las últimas dos bajas fueron la del postulante de Colombia Piensa en Grande, Luis Pérez, el 11 de mayo, y la de Ingrid Betancourt, candidata de Verde Oxígeno, el viernes 20. La lista final de los que buscan llegar a la jefatura del Estado es de apenas seis aspirantes.